Ya estamos en otoño y el cambio en los bosques se irá produciendo gradualmente hasta alcanzar su máximo esplendor. En concreto por las zonas que suelo frecuentar, la última semana de octubre y la primera de noviembre en cuanto a la Cerdanya se refiere y las dos siguientes en el Montseny.
Es todo un regalo para el fotógrafo pero es mucho más efimero de lo que parece, pues los árboles lucen sus mejores galas durante un periodo que oscila entre una semana y diez días y una vez terminado este periodo habrá que esperar al año siguiente.
Como tantos fotógrafos de naturaleza, empiezo a visualizar posibilidades de trabajo para este año: Motivos, rincones, técnicas, colores o luces y espero que, como cada año, el bosque nos regale con buenas oportunidades.
Ya queda menos.
Fajeda d'en Jordà (Girona)
Nikon D2x, AFS Nikkor 70-200mm f2.8 VR ED, polarizador, trípode, Raw, ISO 100.
No hay comentarios:
Publicar un comentario