Con los altos de la Molina y la Masella al fondo, un atardecer de este verano permitió jugar con algunos elementos bastante atractivos visualmente desde mi punto de vista.
En cuanto al color, el manto de flores amarillas en primer plano y la ausencia de viento que permitía una exposición relajada de este, junto con la nube iluminada con los tonos rojizo-anaranjados de la puesta, aportaban un primer plano y un cielo llenos de color.
Por otra parte, el pino del centro contrastado con las mencionadas cumbres marcaban la sensación de proximidad y distancia respectivamente,
Un sencillo prado, un atardecer atractivo y la sensación de libertad en la montaña, bien pueden ser un buen escenario para la búsqueda de esas imágenes que tanto nos atraen.
Fotografía realizada en la Cerdanya Francesa.
Nikon D2x, Nikkor AF-S 17-35 F2.8, polarizador, DN-2, DN-3, trípode, Raw, ISO 100.
Me gusta mucho las tonalidades que consigues con los filtros del cielo en comparación con el primer pano. Magnifica nube.
ResponderEliminarMuchas gracias Esteve. Los filtros te añaden muchas posibilidades para los paisajes, aunque no siempre se acierta en la medida adecuada.Seguimos intentando mejorar. Gracias
ResponderEliminar